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"Romance del Loco"

Texto e ilustraciones creadas por Patxi Melgarejo basadas en el personaje que pudo inspirar a Cervantes  la creación de El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha.

"Hombres, mujeres y niños, 

Mendigos y caballeros, 

Paisanos y militares, 

Carcamales y mancebos. 

 

El que ya no peina canas

Porque se quedó sin pelo, 

Y el que el tupé se compone 

Con bandolina y ungüento... 

 

Vengo a contarles la historia 

Del león que aquí mataron, 

Siendo Don Carlos el rey

Cuando Don Juan fue apresado 

En esta villa de Infantes

Donde otro Juan era el amo, 

De la Cueva le llamaban, 

Siendo en justicia muy malo. 

 

Juan de León sin cerebro

Era hombre bien educado, 

Corría pueblos y ventas

Por destierro tropezando, 

Con calzas y viejas mallas

Llevando la espada en mano, 

Ballesta también llevaba

Y además era bien santo. 

 

Dando arengas y consejos 

Estaba ya varios años 

De vagar con Juan Portillo

Andando por estos campos. 

Sin tener culpa ninguna, 

Por error fue denunciado, 

Que de envidia y malas lenguas

Nuestro campo va sobrado. 

 

Al alcalde que lo juzga

De su cubil lo sacaron, 

Le acusó de tropelías 

Y no quiso oir descargo, 

Sin evidencia ninguna

Para bien pagar el pato, 

Condenandole a la horca

Como si no fuera humano. 

 

Fin de la primera parte, 

Que no pinta nunca nada, 

El final es lo que vale

Y lo que importará mañana. 

 

 

 

Justicia menospreciada

No hubo después de muerto, 

Pues apeló al rey Don Carlos 

Su tía clamando al cielo, 

Que vio recta su protesta 

De si bien no estaba cuerdo

Fue injusto condenarlo

Cuando debió ser absuelto. 

 

El alcalde bien tranquilo 

Tras aquel juicio siniestro 

No esperaba mal ninguno

Ni que fuera caso abierto 

Pensando que se libraba 

De mirarse en ese espejo

Y encontrarse cara a cara

Con la mirada de un cerdo. 

 

El monarca aplicó ley

Y en llegandose a buen puerto 

Condenó a aquel miserable 

Alcalde del esperpento 

A pagar por la injusticia 

De no verse en el pellejo

De aquel pobre hombre valiente 

Condenado por sincero. 

 

Quitole todos los bienes 

Y aún siendo cristiano viejo

Le quitó también licencia 

Dándole guarrido en huerto. 

Del que no se supo nada

Fue de Portillo el violento

Que tal vez fuera culpable

Quedando el caso resuelto. 

 

Desde entonces y hasta ahora

La lección voló con viento 

Cantando la vida y gracia

Del rey Carlos "el viajero" 

Cómo restauró la honra 

Del Don Juan que fue tan bueno

Quedando la anciana tía 

Tranquila de sus asuetos. 

 

Y aquí se acaba el romance

Que en el pliego escrito está, 

Sólo dos céntimos cuesta

A quien se lo quiera llevar. "

 

 

Por Patxi Melgarejo

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